viernes, 22 de julio de 2011

Vuela...

Vuela, tan alto como puedas, que puedas ver los países, las ciudades. Que puedas tocar las nubes, que te agarres a ellas para no caerte. Vuela... tan alto hasta que tengas vértigo, hasta que sientas pánico y necesites bajar. No te caigas, ten cuidado. Tranquilo, yo te cuidaré, sanaré tus heridas. Haré que cicatricen lo más rápido posible, tan rápido que ni te des cuenta. No te asustes, yo estoy aquí para protegerte. No suelo decírtelo frecuentemente, pero creo que es el momento. El momento de volar juntos, de unir dos YO para formar un NUESTRO.

No hay comentarios:

Publicar un comentario